El Patrimonio de la Empresa
Definición y Componentes Fundamentales
El patrimonio empresarial es el conjunto de bienes, derechos y obligaciones que tiene una empresa, debidamente valorados en relación con la finalidad a la que se destinen. Entendemos por bien todo aquello que puede ser apreciado por las personas a las que sirve. Los derechos (de cobro) son las deudas que los clientes y otros deudores tienen que pagar a la empresa. Las obligaciones (de pago) son las deudas que la empresa tiene que pagar a los proveedores y otros acreedores.
El conjunto de bienes y derechos se agrupa bajo la denominación de activo, mientras que las obligaciones constituyen el pasivo. La diferencia entre el activo y el pasivo representa la riqueza neta de la empresa, denominada patrimonio neto.
La Ecuación Fundamental del Patrimonio
La relación entre estos tres componentes se expresa mediante la ecuación fundamental de la contabilidad: Activo = Patrimonio Neto + Pasivo. Esto significa que el total del activo (inversiones o destino de los fondos) siempre debe ser igual a la suma del patrimonio neto y el pasivo (origen de los fondos o financiación).
El activo refleja la estructura económica de la empresa, es decir, el total de sus inversiones o el destino de sus fondos. El patrimonio neto y el pasivo reflejan la estructura financiera de la empresa, es decir, el origen de los medios de financiación de los que dispone.
La contabilidad se basa en un sistema de partida doble, que anota todas las operaciones dos veces: por un lado, de dónde proviene el dinero (financiación) y, por otro, dónde se invierte (inversión). Por tanto, es lógico que ambas partes de la ecuación siempre coincidan.
Masas Patrimoniales
Cada uno de los grandes grupos (activo, patrimonio neto y pasivo) está formado por diferentes masas patrimoniales, que son agrupaciones de elementos patrimoniales homogéneos entre sí.
Clasificación del Activo
Los elementos del activo se ordenan y clasifican en el balance según su liquidez (capacidad para convertirse en dinero), de menor a mayor liquidez. Está formado por las siguientes masas patrimoniales principales:
- Activo no corriente: Formado por aquellos elementos del patrimonio vinculados a la empresa durante más de un ejercicio económico. Incluye el inmovilizado material, intangible, inversiones financieras a largo plazo e inversiones inmobiliarias.
- Activo corriente: Constituido por aquellos elementos que se encuentran en constante rotación, es decir, que se espera que se conviertan en dinero, se consuman o se vendan en el ciclo normal de explotación o en menos de un año. Incluye existencias, deudores comerciales (realizable) y tesorería (disponible).
Clasificación del Patrimonio Neto y del Pasivo
Los elementos del patrimonio neto y del pasivo se ordenan y clasifican según su exigibilidad (plazo en el que deben ser atendidas las obligaciones de pago), de menor a mayor exigibilidad. Están formados por las siguientes masas patrimoniales:
- Patrimonio neto: Representa los fondos propios de la empresa. Incluye recursos aportados por los socios, reservas (beneficios no distribuidos de ejercicios anteriores) y resultados del ejercicio actual. También puede incluir subvenciones de capital no reintegrables. No tiene un vencimiento para su devolución, por lo que es la partida menos exigible.
- Pasivo no corriente (o exigible a largo plazo): Formado por deudas y obligaciones que la empresa debe devolver en un periodo superior a un año.
- Pasivo corriente (o exigible a corto plazo): Deudas y obligaciones que la empresa debe devolver en el plazo de un año o dentro del ciclo normal de explotación.
Los elementos patrimoniales son cada uno de los bienes, derechos y obligaciones que forman el patrimonio de la empresa. Para asegurar la uniformidad, todas las personas que utilizan la contabilidad se sirven de una misma denominación para definir un mismo elemento patrimonial, según lo establecido en el Plan General de Contabilidad.
El Balance de Situación
El conjunto de elementos patrimoniales, agrupados en sus respectivas cuentas (cuentas de activo, de pasivo y de patrimonio neto), se representa en un documento contable fundamental: el balance de situación. Este es un estado financiero que muestra, en un momento determinado, el conjunto de bienes, derechos y obligaciones que forman el patrimonio empresarial, debidamente ordenados en masas patrimoniales y valorados en unidades monetarias (por ejemplo, euros).
En el balance de situación:
- Los elementos que forman el activo se ordenan de menor a mayor liquidez (facilidad para convertirse en dinero).
- Los elementos que forman el patrimonio neto y el pasivo se ordenan de menor a mayor exigibilidad (prioridad en la obligación de pago). Así, primero se sitúa el patrimonio neto (no exigible o exigibilidad nula), seguido del pasivo no corriente (exigible a largo plazo) y, finalmente, el pasivo corriente (exigible a corto plazo).
Los Resultados de la Empresa
La Cuenta de Pérdidas y Ganancias
Para determinar el rendimiento de la actividad empresarial durante un periodo (generalmente un ejercicio económico), se utiliza la cuenta de pérdidas y ganancias (también llamada cuenta de resultados). Este estado financiero tiene como objetivo calcular el resultado que una empresa ha obtenido, detallando los ingresos y gastos que lo han generado y las operaciones realizadas para llegar a dicho resultado.
En esta cuenta, se contraponen los ingresos del periodo con los gastos necesarios para obtenerlos, calculando así diferentes niveles de resultado de forma sucesiva:
- Resultado de explotación (o Beneficio Antes de Intereses e Impuestos – BAII): Es el resultado generado por la actividad principal o típica de la empresa. Se calcula como la diferencia entre los ingresos de explotación y los gastos de explotación.
- Resultado financiero: Proviene de las operaciones financieras de la empresa (inversión y financiación). Se calcula como la diferencia entre los ingresos financieros (ej. intereses de inversiones) y los gastos financieros (ej. intereses de deudas).
- Resultado antes de impuestos (o Beneficio Antes de Impuestos – BAI): Es la suma del resultado de explotación y el resultado financiero (BAII + Resultado Financiero). Representa el beneficio generado por la empresa antes de deducir el impuesto sobre sociedades.
- Resultado neto (o Beneficio Neto – BN): Es el resultado final del ejercicio económico, después de deducir el impuesto sobre beneficios del BAI. Este es el beneficio (o pérdida) que queda a disposición de la empresa para ser distribuido como dividendos o reinvertido (reservas).
Si los ingresos totales superan a los gastos totales, la empresa obtiene ganancias (beneficio). Si, por el contrario, los gastos son mayores que los ingresos, la empresa incurre en pérdidas.