Componentes del Sector Público Español
El sector público en España se compone de diversas entidades:
- Administraciones Públicas:
- Administración Central del Estado y sus Organismos Autónomos.
- Administraciones Públicas Territoriales: Comunidades Autónomas y Corporaciones Locales (Ayuntamientos, Diputaciones, etc.).
- Administración de la Seguridad Social.
- Empresas Públicas: Entidades con objetivos fundamentales para la economía del país, operando en sectores estratégicos como energía o transportes.
- Instituciones de la Unión Europea: España, como Estado miembro, está sujeta a las normativas y participa en instituciones como el Parlamento Europeo, el Consejo de la UE, la Comisión Europea, etc.
Estados Miembros de la Unión Europea
(Contexto relevante para la pertenencia de España)
- Alemania
- Austria
- Bélgica
- Bulgaria
- Chipre
- Croacia
- Dinamarca
- Eslovenia
- España
- Estonia
- Finlandia
- Francia
- Grecia
- Hungría
- Irlanda
- Italia
- Letonia
- Lituania
- Luxemburgo
- Malta
- Países Bajos
- Polonia
- Portugal
- República Checa
- República Eslovaca
- Rumanía
- Suecia
Organización Territorial y Presupuestos
España es un Estado descentralizado. Esto implica un trasvase significativo de competencias estatales hacia las Comunidades Autónomas y las entidades locales a lo largo de los últimos años.
Los Presupuestos Públicos
Las administraciones públicas determinan anualmente cuánto gastarán el año siguiente y en qué, así como deben prever los ingresos necesarios para financiar dicho gasto. Esos cálculos sobre ingresos y gastos constituyen los presupuestos públicos.
Presupuestos Generales del Estado (PGE)
Los Presupuestos Generales del Estado son un documento aprobado por ley cada año en el que se determina la cantidad que el Estado puede gastar y en qué ha de gastarla, así como la previsión de los ingresos necesarios para financiar ese gasto.
Situaciones Presupuestarias
- Si los ingresos públicos son iguales a los gastos públicos, hay un equilibrio presupuestario.
- Si los ingresos públicos son mayores que los gastos públicos, hay un superávit público.
- Si los ingresos públicos son menores que los gastos públicos, hay un déficit público.
Ingresos Públicos: Fuentes de Financiación
El sector público necesita recursos suficientes para poder financiar los gastos públicos. Estos recursos constituyen los ingresos públicos y se obtienen principalmente mediante las cotizaciones sociales, los tributos y otras fuentes de ingresos.
Tipos de Ingresos Públicos
- Cotizaciones Sociales: Pagos que se realizan a la Seguridad Social y por los que se adquiere el derecho a percibir determinadas prestaciones (jubilación, desempleo, incapacidad, etc.).
- Tributos: Son la fuente principal de ingresos. Existen tres grandes tipos:
- Impuestos
- Tasas
- Contribuciones Especiales
- Otros Ingresos: Incluyen:
- Transferencias corrientes (ej. fondos de la UE).
- Ingresos patrimoniales (ej. alquiler de bienes públicos).
- Ingresos por Loterías y Apuestas del Estado.
- Operaciones de capital (ej. enajenación de inversiones, transferencias de capital).
El Sistema Tributario Español
El sistema tributario español es el conjunto de impuestos y demás tributos existentes en España, establecidos y regulados por ley conforme a los principios enunciados en la Constitución.
Principios Constitucionales del Sistema Tributario
- Principio de Igualdad y Generalidad: Todos los españoles son iguales ante la ley a la hora de pagar los tributos, sin privilegios.
- Principio de Capacidad Económica: Los tributos deberán tener en cuenta la cantidad de ingresos o riqueza (capacidad económica) que posee un ciudadano para determinar su contribución.
- Principio de Progresividad: Quienes más capacidad económica tengan, más tributos pagarán, y además, el porcentaje de su renta o patrimonio destinado a impuestos será mayor.
- Principio de No Confiscatoriedad: La tributación no podrá ser tan elevada que prive al ciudadano de sus rentas o patrimonio.
- Principio de Legalidad: Solo mediante ley se pueden establecer los tributos del Estado y regular sus elementos esenciales.
Clasificación de los Tributos
Impuestos
Son pagos que los ciudadanos están obligados a realizar por ley para que el Estado y el resto de las administraciones públicas dispongan de los recursos suficientes con los que financiar los gastos públicos. Constituyen la mayor parte de los ingresos públicos.
Impuestos Directos
Son aquellos que se aplican directamente sobre el contribuyente, gravando la obtención de renta o la posesión de patrimonio.
- Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF): Grava la renta obtenida por las personas físicas. Es un impuesto directo y progresivo.
- Impuesto sobre Sociedades (IS): Grava los beneficios obtenidos por las personas jurídicas (empresas). Es un impuesto directo y, generalmente, proporcional (tipo fijo).
- Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI): Recae sobre la valoración de los bienes inmuebles en propiedad. Cuanto mayor sea el valor catastral del bien, mayor será el impuesto. Es gestionado por los ayuntamientos.
Impuestos Indirectos
Son aquellos que gravan el consumo o la utilización de bienes y servicios, sin tener en cuenta directamente la capacidad económica de la persona que los paga (aunque indirectamente, quien más consume, más paga).
- Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA): Es el principal impuesto indirecto en España. Grava el consumo final. Las empresas actúan como recaudadoras: repercuten el IVA en sus ventas y servicios, y pueden deducirse el IVA soportado en sus compras y gastos. La diferencia entre el IVA repercutido y el soportado se liquida periódica (mensual o trimestralmente) con Hacienda. Si las cuotas repercutidas son superiores a las soportadas, deberán ingresar la diferencia a Hacienda.
- Otros impuestos indirectos: Impuestos Especiales (sobre alcohol, tabaco, hidrocarburos), Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITP y AJD), etc.
Tasas
Son tributos que se pagan por el uso privativo o aprovechamiento especial del dominio público, o por la prestación de servicios públicos o realización de actividades administrativas que afecten o beneficien de modo particular al obligado tributario, cuando no sean de solicitud voluntaria o no se presten por el sector privado. Ejemplos: tasas por recogida de basuras, alcantarillado, expedición del DNI o permiso de conducir, tasas judiciales.
Contribuciones Especiales
Son tributos cuyo hecho imponible consiste en la obtención por el obligado tributario de un beneficio o de un aumento de valor de sus bienes como consecuencia de la realización de obras públicas o del establecimiento o ampliación de servicios públicos. Ejemplos: pavimentación de una calle, construcción de una acera, mejora del alumbrado público que beneficia directamente a ciertas propiedades.
El Gasto Público
El conjunto de todos los gastos realizados por las administraciones públicas se denomina gasto público. Se puede clasificar según diferentes criterios:
Clasificación Orgánica (¿Quién gasta?)
Detalla los gastos según la entidad u organismo que los realiza:
- Gastos de la Administración Central del Estado.
- Gastos de la Seguridad Social.
- Gastos de las Comunidades Autónomas.
- Gastos de las Corporaciones Locales (Ayuntamientos, Diputaciones…).
Clasificación Funcional (¿Para qué se gasta?)
Señala la finalidad o el destino al que se dedican los gastos públicos, agrupándolos por funciones o políticas (sanidad, educación, defensa, servicios sociales, etc.), sumando los gastos de todas las administraciones públicas para cada finalidad (sin incluir el gasto en deuda pública).
Clasificación Económica (¿Cómo se gasta?)
Distingue la naturaleza económica del gasto:
- Gastos Corrientes (Operaciones corrientes): Destinados al funcionamiento normal de los servicios públicos y a la redistribución de la renta.
- Gastos de personal: Sueldos y salarios de los empleados públicos.
- Gastos en bienes y servicios: Compras de material, suministros, etc.
- Gastos financieros: Intereses de la deuda pública.
- Transferencias corrientes: Prestaciones sociales (pensiones, desempleo), subvenciones a empresas, etc.
- Gastos de Capital (Operaciones de capital): Destinados a aumentar la capacidad productiva o el patrimonio público.
- Inversiones reales: Construcción de infraestructuras (carreteras, hospitales, colegios), compra de equipamiento duradero.
- Transferencias de capital: Ayudas a empresas para inversión, etc.
Nota sobre las transferencias: En los gastos de transferencia (tanto corrientes como de capital), el sector público actúa como intermediario, detrayendo recursos (impuestos, cotizaciones) de unos agentes y transfiriendo ese dinero a otros (familias, empresas) sin exigirles una contrapartida directa e inmediata en forma de bien o servicio.
La Política Fiscal
La política fiscal está constituida por las decisiones y medidas que los gobiernos llevan a cabo sobre el gasto público y los impuestos con el objetivo de influir en la economía para facilitar el crecimiento económico sostenible, el pleno empleo, la estabilidad de los precios y el control del déficit público y la deuda.
Política Fiscal Expansiva
Finalidad: Estimular la demanda agregada y la economía, especialmente en fases de recesión o bajo crecimiento.
- Vía Gasto Público:
- Aumento del gasto en obras públicas.
- Incremento de la compra de bienes y servicios por parte del sector público.
- Aumento de las transferencias a familias (prestaciones) y empresas (subvenciones).
- Vía Impuestos:
- Reducción de impuestos (ej. IRPF, Sociedades, IVA) para aumentar la renta disponible de las familias (fomentando el consumo) y los beneficios empresariales (fomentando la inversión).
Efecto esperado: Aumento del consumo y la inversión, crecimiento del PIB, reducción del desempleo. Riesgo: Puede generar inflación y aumentar el déficit público.
Política Fiscal Restrictiva (o Contractiva)
Finalidad: Frenar la demanda agregada para controlar la inflación o reducir el déficit público y la deuda.
- Vía Gasto Público:
- Reducción del gasto público (menos obras, menos compras, menores transferencias).
- Vía Impuestos:
- Subida de impuestos para disminuir la renta disponible de las familias y los beneficios empresariales, reduciendo así el consumo y la inversión.
Efecto esperado: Disminución del consumo y la inversión, control de la inflación, reducción del déficit público. Riesgo: Puede frenar el crecimiento económico y aumentar el desempleo.