Fundamentos Empresariales: Objetivos, Estructura y Desarrollo en el Contexto Actual

La Empresa y sus Fundamentos

Objetivos de la Empresa

Maximizar el beneficio: El concepto de rentabilidad relaciona los beneficios obtenidos en un período con el capital invertido en la empresa.
Crecimiento y poder en el mercado: Para asegurar beneficios futuros y mayores, así como una posición sólida frente a la competencia.
Estabilidad y adaptabilidad al entorno: La empresa debe estar abierta y ser capaz de ajustarse a los cambios en el mercado y a las innovaciones tecnológicas para asegurar su supervivencia y prosperidad a largo plazo.
Responsabilidad social: Implica la consideración de objetivos de responsabilidad social y ética hacia los diversos colectivos con los que interactúa (empleados, clientes, proveedores, comunidad local) y hacia la sociedad en general y el medio ambiente.

Concepto de Empresa

Conjunto de elementos (humanos, técnicos, financieros, materiales e inmateriales) organizados y coordinados por la dirección, orientados a la obtención de una serie de objetivos (económicos y sociales), actuando siempre bajo condiciones de riesgo en un entorno competitivo.

Principales Teorías sobre la Empresa

Teoría de la agencia: La empresa se considera un nexo de contratos (explícitos e implícitos) entre los diferentes agentes que participan en ella (principal y agente), donde surgen conflictos de intereses que generan costes de agencia.
Teoría neoclásica: La empresa es una unidad económica de producción cuya función es transformar factores productivos (inputs) en bienes y servicios (outputs), con el objetivo principal de maximizar el beneficio en un mercado de competencia perfecta.
Teoría de los costes de transacción: Sostiene que las empresas existen como estructuras de gobernanza alternativas al mercado para minimizar los costes de transacción (costes de información, negociación, supervisión, etc.) asociados a la producción y el intercambio.
Teoría social: El objetivo de la empresa debe contemplar metas que beneficien no solo a los propietarios, sino también a otras partes interesadas (stakeholders) o a la sociedad en su conjunto, integrando aspectos éticos y de responsabilidad social corporativa.
Teoría de la empresa como sistema: Concibe a la empresa como un sistema abierto, compuesto por un conjunto de partes interdependientes (subsistemas: real, financiero, directivo) que interactúan entre sí y con su entorno para alcanzar objetivos comunes, formando una unidad orgánica.

Dimensión Empresarial y Criterios

La dimensión empresarial se refiere a la capacidad productiva o tamaño de la empresa. Se mide por diversos criterios, como:

El número de trabajadores.
El volumen de ventas o facturación anual.
El volumen de producción (unidades físicas).
Los recursos propios o patrimonio neto.
El activo total o los recursos totales en funcionamiento.
Los beneficios brutos anuales.

El Empresario: Concepto y Funciones

El empresario es la persona o grupo de personas que, aportando capital o su capacidad directiva, toma las decisiones generales en la empresa, planifica los objetivos a conseguir, organiza los medios necesarios y controla su ejecución, asumiendo el riesgo inherente a la actividad. Sus funciones principales son:

Planificar: Define la misión, visión y objetivos de la empresa, y establece las estrategias y planes de acción para alcanzarlos. Decide qué productos y modelos ha de fabricar la empresa, a qué mercados dirigirse, etc.
Organizar: Diseña la estructura organizativa, asigna tareas y responsabilidades a cada persona o departamento, y coordina las actividades para lograr una actuación eficiente.
Gestionar/Dirigir: Lidera, motiva y guía al personal para la consecución de los objetivos.
Controlar: Comprueba si los resultados obtenidos se corresponden con las previsiones y objetivos planificados, identificando desviaciones y aplicando medidas correctoras.
Asumir riesgos: El empresario invierte capital y toma decisiones en un entorno de incertidumbre. Si su apreciación sobre el mercado (ej. precio de venta, demanda, costes) es errónea, no obtendrá beneficios e incluso podría incurrir en pérdidas.

Sociedades Cooperativas en Extremadura

Las sociedades cooperativas se caracterizan por ser un tipo especial de empresa basada en los principios cooperativos, con participación democrática (generalmente, un socio, un voto), donde el socio es el principal protagonista y existe un interés común por un proyecto socioeconómico. En Extremadura, son particularmente relevantes las sociedades cooperativas de trabajo asociado (donde los socios aportan su trabajo) y las agrarias (que agrupan a productores para la comercialización, transformación o suministro de insumos), estas últimas a menudo vinculadas a ayudas comunitarias de la Política Agraria Común (PAC). Los resultados económicos (excedentes) se distribuyen entre los socios en función de su actividad cooperativizada o se reinvierten en la propia cooperativa. Como forma de creación de empleo, desarrollo local y vertebración del territorio, suponen un preciado recurso para alcanzar la cohesión social y el bienestar social.

Entorno de la Empresa

El entorno de la empresa está constituido por todos aquellos factores externos que la afectan y sobre los que, en general, no tiene una influencia directa o total, pero a los que debe adaptarse. Se distingue entre:

Entorno General (o macroentorno): Amplio conjunto de factores que afectan por igual a todas las empresas de una determinada sociedad o ámbito geográfico. Incluye dimensiones como la política, económica, sociocultural, tecnológica, ecológica o medioambiental y legal (análisis PESTEL).
Entorno Específico (o microentorno/sectorial): Factores que influyen de manera más directa y cercana sobre un grupo concreto de empresas que tienen características comunes o que compiten en el mismo sector industrial (clientes, proveedores, competidores actuales, productos sustitutivos, y la amenaza de nuevos entrantes – análisis de las 5 Fuerzas de Porter).

Ventajas de las Tecnologías de la Información (TIC) para la Empresa

Los instrumentos informáticos y telemáticos, englobados en las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), han generado cambios profundos y continuos en los sistemas de gestión, producción y comunicación empresarial. El uso de las TIC permite la automatización de numerosas actividades y procesos, la mejora en el diseño de productos y servicios, y una comunicación más rápida, eficiente y fluida tanto interna (entre los miembros de la organización) como externa (con clientes, proveedores, administraciones, etc.). Su implementación reduce el tiempo y el coste de transmisión y procesamiento de la información, lo que conlleva ventajas significativas como:

Liberar tiempo del personal que se puede dedicar a otras tareas de mayor valor añadido (innovación, atención al cliente, estrategia).
Llevar a la práctica las decisiones con más rapidez y eficacia, basándose en datos más precisos y actualizados.
Aumentar la visibilidad de la empresa, permitiendo darse a conocer, ofrecer sus productos y servicios a un mercado más amplio (global), y mejorar la imagen de marca.
Mejorar la eficiencia operativa y reducir costes.
Facilitar la innovación en productos, servicios y modelos de negocio.

Objetivos Clave de la Implementación de TIC en la Empresa

Captar con mayor rapidez y precisión los problemas, necesidades y oportunidades del mercado mediante un mejor acceso, análisis y procesamiento de la información.
Liberar tiempo del personal de tareas rutinarias y repetitivas para que se pueda dedicar a actividades más estratégicas, creativas o de relación.
Ayudar a llevar a la práctica las decisiones de forma más ágil, coordinada y fundamentada en datos.
Facilitar la formación de redes de empresa, la colaboración interempresarial y el trabajo en equipo, incluso a distancia.
Desarrollar nuevos canales de distribución, venta y comunicación con los clientes (ej. comercio electrónico, marketing digital, redes sociales).
Optimizar la gestión de la cadena de suministro y las relaciones con proveedores.

Desarrollo y Crecimiento Empresarial

Características de las Empresas Multinacionales

Una empresa multinacional (EMN) o transnacional es una sociedad mercantil, generalmente de gran tamaño, que posee y controla activos productivos (fábricas, filiales, sucursales) en dos o más países. Está formada por una empresa matriz (ubicada en el país de origen) que coordina y dirige una red de filiales o subsidiarias en otros países. La matriz es la empresa originaria del Estado donde se inicia la actividad y desde donde se suele dirigir la estrategia global del grupo. Sus características principales incluyen:

La matriz ejerce el control sobre las filiales a través de su participación mayoritaria o total en el capital, y/o mediante acuerdos de gestión, transferencia de tecnología y conocimientos.
Su dirección y planificación estratégica suelen estar centralizadas en la matriz para asegurar la coherencia global, aunque puede existir cierto grado de descentralización operativa y adaptación local en las filiales.
Son empresas de grandes dimensiones que buscan optimizar su cadena de valor a nivel global, produciendo con costes reducidos mediante la explotación de economías de escala, el acceso a recursos más baratos (mano de obra, materias primas), la proximidad a mercados clave y la diversificación de riesgos.
Generalmente, son las mejor situadas en sus sectores para lograr una posición competitiva fuerte o de liderazgo en el mercado mundial, gracias a sus recursos financieros, tecnológicos, de marketing y de gestión.
Se las evalúa y juzga por los resultados consolidados del grupo empresarial en su conjunto, reflejando su desempeño global.

Características de las PYMES (Pequeñas y Medianas Empresas)

Las Pequeñas y Medianas Empresas (PYMES) son un componente vital y mayoritario del tejido productivo en la mayoría de las economías. Presentan particularidades distintivas frente a las grandes empresas:

Generadoras de un gran volumen de empleo: El alto porcentaje de empleo total que absorben las PYMES se debe, en gran medida, al elevado número de empresas de pequeña y mediana dimensión existentes.
Bajas barreras de entrada (relativamente): En muchos sectores, las PYMES pueden crearse con menores requisitos de capital e inversión inicial en comparación con las grandes corporaciones, siendo común su origen en la iniciativa y experiencia de sus propietarios en determinados oficios o nichos de mercado.
Proximidad de la producción al consumo y especialización: Suelen operar en mercados locales, regionales o nichos específicos, lo que les permite una mayor cercanía al cliente y una adaptación más ágil de su producción a demandas concretas. Las grandes empresas no siempre están presentes o no dominan todas las actividades económicas ni todos los territorios.
Vinculación con la Gran Empresa: Frecuentemente, la gran empresa no podría cumplir sus objetivos sin la colaboración de las PYMES, que actúan como proveedoras especializadas, subcontratistas, distribuidoras, clientes o colaboradoras en innovación.
Adaptación rápida a la coyuntura económica: Una de sus grandes características es su flexibilidad y adaptabilidad, permitiéndoles reaccionar con mayor agilidad a los cambios del entorno económico y de las demandas del mercado debido a sus estructuras organizativas más sencillas y procesos de toma de decisión más cortos.

Ventajas de las PYMES

Flexibilidad y Agilidad: Su menor dimensión y estructura más simple les permiten una mayor capacidad de adaptación a los cambios del mercado, a las innovaciones y a las necesidades específicas de los clientes.
Proximidad al cliente: Pueden establecer una relación más cercana, directa y personalizada con sus clientes, lo que facilita la fidelización y el conocimiento de sus necesidades.
Menor conflictividad laboral y mayor participación (potencialmente): En general, las relaciones laborales suelen ser más directas y menos formales, lo que puede traducirse en un ambiente laboral con menor conflictividad y facilitar una mayor participación e implicación del personal.
Capacidad de cubrir nichos de mercado: Su agilidad y especialización les permiten identificar y satisfacer necesidades específicas del mercado que pueden no ser atractivas, rentables o fácilmente abordables para las grandes empresas.
Importantes creadoras de empleo: Son fundamentales en la generación neta de puestos de trabajo y en la dinamización económica local y regional.
Unidad e independencia de la dirección (en muchos casos): La concentración de la propiedad y la dirección (especialmente en las más pequeñas) puede permitir una toma de decisiones más rápida y una visión estratégica más cohesionada, aunque también puede ser una limitación si falta profesionalización.

Desventajas de las PYMES

Dificultades de financiación: A menudo no pueden acceder a todas las fuentes financieras disponibles para las grandes empresas (ej. mercados de capitales) o lo hacen en condiciones menos favorables (mayores tipos de interés, más garantías exigidas, menor plazo).
Menor poder de negociación: Frente a grandes proveedores o clientes, su capacidad para imponer condiciones o negociar precios y plazos es limitada.
Vulnerabilidad al control externo y a la competencia: Pueden ser más fácilmente adquiridas y controladas por grandes empresas, o desplazadas por competidores con más recursos.
Limitaciones tecnológicas y menor inversión en I+D+i (Investigación, Desarrollo e innovación): Disponen de menos recursos financieros y humanos para invertir en investigación, desarrollo de nuevos productos, adopción de tecnologías avanzadas e innovación en general.
Costes de producción unitarios potencialmente más altos: Al no poder fabricar en grandes series y aprovechar economías de escala en la misma medida que las grandes empresas, sus costes unitarios pueden ser más elevados, lo que dificulta la competencia en precio.
Menor acceso a formación y desarrollo del personal cualificado: El personal puede tener menos oportunidades de formación continua y especializada en comparación con el de las grandes empresas, y puede ser más difícil atraer y retener talento altamente cualificado.
Menor diversificación de productos y mercados: Suelen estar más concentradas en pocos productos o mercados, lo que aumenta su riesgo ante cambios en la demanda o la aparición de nuevos competidores.

Crecimiento Interno y Externo de la Empresa

El crecimiento interno (también llamado orgánico) es el que realiza la empresa a través de nuevas inversiones en el seno de la propia organización, aumentando su patrimonio y su capacidad productiva. Se basa en el desarrollo de sus propios recursos y capacidades (ej. construcción de nuevas instalaciones, desarrollo de nuevos productos, contratación de más personal, expansión a nuevas áreas geográficas con recursos propios).

El crecimiento externo se produce como consecuencia de la adquisición, fusión, control o cooperación con otras empresas ya existentes. Permite a la empresa crecer más rápidamente, acceder a nuevos mercados, tecnologías, conocimientos, o aumentar la cuota de mercado y fortalecer su posición competitiva.

Estrategias Comunes de Crecimiento Externo

Adquisición o Compra de empresas: Una empresa (adquirente) compra la totalidad o una parte significativa del capital social de otra empresa (adquirida), tomando su control.
Fusión de empresas: Dos o más empresas deciden unirse para formar una nueva entidad legal (fusión pura, desapareciendo las originales) o una de ellas absorbe a la(s) otra(s) (fusión por absorción, donde la absorbida desaparece y se integra en la absorbente).
Cooperación empresarial o Alianzas estratégicas: Dos o más empresas independientes acuerdan unir recursos o compartir capacidades para desarrollar un proyecto o actividad común, sin perder su personalidad jurídica ni independencia total (ej. joint ventures o empresas conjuntas, consorcios, franquicias, licencias, acuerdos de I+D).

Estrategias Comunes de Crecimiento Interno

Reinversión de los beneficios obtenidos: Utilizar las ganancias generadas por la propia actividad para financiar nuevas inversiones y expansión.
Aportación de los socios (ampliación de capital): Los propietarios (actuales o nuevos) inyectan más capital en la empresa.
Endeudamiento con entidades financieras u otros acreedores: Obtención de financiación externa a través de préstamos, créditos o emisión de deuda para acometer inversiones.
Especialización: Concentrarse en el producto o mercado actual para mejorar la eficiencia o la cuota de mercado.
Desarrollo de nuevos productos o servicios para los mercados actuales.
Desarrollo de nuevos mercados (geográficos o segmentos) para los productos actuales.
Diversificación: Entrada en nuevos productos y nuevos mercados.

Impacto y Oportunidades de la Globalización Económica para las Empresas

La globalización económica se define como la creciente interdependencia económica entre el conjunto de los países del mundo, provocada fundamentalmente por el aumento del volumen y de la variedad de las transacciones internacionales de bienes, servicios y factores productivos (capital, tecnología), así como de los flujos internacionales de capitales y la difusión acelerada de la información y el conocimiento, facilitada por los avances tecnológicos y la liberalización comercial.

Los efectos más importantes de la globalización en el ámbito empresarial incluyen:

La integración de la producción a escala mundial y la consolidación de empresas globales y transnacionales que operan y coordinan actividades (diseño, producción, marketing, finanzas) en múltiples países para optimizar costes y acceder a mercados.
Una tendencia hacia la estandarización de productos y servicios para atender a mercados más amplios y aprovechar economías de escala, aunque también la necesidad de adaptación local (estrategias de glocalización).
El desarrollo y expansión de zonas integradas de comercio (como la Unión Europea, USMCA, Mercosur, ASEAN), que eliminan o reducen barreras arancelarias y no arancelarias entre países miembros, facilitando el comercio y la inversión.
La posibilidad de alcanzar mayores economías de escala y de alcance al acceder a mercados de mayor tamaño y diversificar operaciones.
Mayor competencia internacional, pero también acceso a una mayor variedad de proveedores, tecnologías más eficientes y talento global.
Mayor facilidad para la deslocalización de actividades productivas buscando ventajas competitivas.

Todo esto supone numerosas oportunidades para las empresas, como la expansión a nuevos mercados internacionales, la optimización de sus cadenas de valor globales, el acceso a recursos y talento diversificados, y la posibilidad de aprender de las mejores prácticas a nivel mundial. Sin embargo, también implica mayores desafíos competitivos, la necesidad de adaptarse a entornos culturales y regulatorios más complejos y dinámicos, y gestionar riesgos geopolíticos y económicos. La exigencia de costes bajos en la producción puede ser una ventaja competitiva y una oportunidad de desarrollo para zonas menos favorecidas que atraen inversión extranjera directa, aunque también puede generar presiones sobre las condiciones laborales, los derechos humanos y el medio ambiente si no se gestiona de forma responsable y sostenible.