1. El Dinero y el Tipo de Interés
El tipo de interés es el precio que tienen que pagar quienes reciben dinero prestado.
Quien presta dinero considera varios factores:
- Prima de riesgo: Compensación por el riesgo de impago que asume.
- Interés: Compensación por renunciar al uso y disfrute de ese dinero durante el tiempo del préstamo.
- Prima de inflación: Cobertura ante la posible pérdida de poder adquisitivo si los precios suben.
1.1. ¿Quién fija los tipos de interés?
El Banco Central Europeo (BCE) se encarga de la política monetaria de la zona euro. Su objetivo principal es vigilar la estabilidad de los precios y mantener la inflación por debajo del 2%. Para ello, establece un tipo de interés de referencia.
Cuando un banco comercial necesita obtener dinero, lo solicita al BCE a este tipo de referencia.
Por otro lado, el Euríbor (Euro Interbank Offered Rate) recoge el promedio al que se prestan dinero los principales bancos que operan en Europa. La mayoría de las hipotecas de tipo variable en España se negocian tomándolo como referencia.
2. La Inflación: Conceptos, Causas y Consecuencias
La inflación se define como el crecimiento continuo y generalizado de los precios de bienes y servicios en una economía durante un período de tiempo.
2.1. Tipos de inflación según su intensidad
- Inflación moderada: Los precios suben lentamente, en niveles del 2-3% anual.
- Inflación galopante: Los precios suben a tasas de dos o tres dígitos, entre el 10% y el 100% anual.
- Hiperinflación: Se produce una subida de precios descontrolada, superior al 100% anual, que provoca una grave crisis económica.
2.2. La deflación: el fenómeno opuesto
La deflación se define como la bajada continua y generalizada de los precios. Aunque pueda parecer positivo, puede ser muy perjudicial para la economía al desincentivar el consumo y la inversión.
2.3. Teorías sobre las causas de la inflación
- Inflación de demanda: Ocurre cuando la demanda agregada (consumo, inversión, gasto público) aumenta más rápido que la capacidad productiva de la economía.
- Inflación de costes: Se produce cuando aumentan los costes de producción (salarios, materias primas, energía), lo que obliga a las empresas a subir los precios. El factor clave es la evolución de la oferta.
2.4. Efectos de la inflación
- Pérdida de poder adquisitivo: El dinero pierde valor y se pueden comprar menos bienes y servicios con la misma cantidad.
- Mayor presión fiscal: Si los salarios suben para compensar la inflación, los trabajadores pueden saltar a tramos de IRPF más altos, pagando más impuestos sin haber aumentado su poder de compra real.
- Pérdida de competitividad: Encarece las exportaciones, lo que reduce la competitividad del país en los mercados internacionales.
- Impacto en préstamos y ahorros: Beneficia a los prestatarios (deben una cantidad fija que pierde valor) y perjudica a los prestamistas y ahorradores (el dinero que reciben o tienen ahorrado vale menos).
- Perjuicio a rentas fijas: Afecta negativamente a pensionistas y empleados públicos, cuyos ingresos no suelen ajustarse con la misma rapidez que la subida de precios.
2.5. Estrategias personales frente a la inflación
A nivel individual, algunas estrategias para mitigar los efectos de la inflación son:
- Invertir los ahorros para obtener una rentabilidad superior a la inflación.
- Comprar en grandes cantidades productos no perecederos para aprovechar precios actuales.
- Buscar productos sustitutivos más baratos.
2.6. La inflación en el caso español
En España, la inflación reciente se ha visto impulsada principalmente por la subida de los precios de la energía (petróleo, gas) y por la dificultad para sustituir estas fuentes por otras más económicas. Adicionalmente, una baja productividad puede contribuir a las presiones inflacionistas.
3. El Desempleo: Tipos, Medición y Políticas
El desempleo o paro hace referencia a la situación de la persona que, estando en edad, condiciones y disposición de trabajar, carece de un puesto de trabajo.
3.1. Colectivos especialmente afectados por el desempleo
- Jóvenes: Se enfrentan al mercado laboral por primera vez y carecen de experiencia.
- Parados de larga duración: Aquellos que llevan un año o más sin trabajo.
- Personas mayores de 45 años: A menudo se enfrentan a dificultades de reinserción laboral tras perder su empleo, por ejemplo, por el cierre de un negocio.
- Personas con discapacidad: Enfrentan barreras adicionales para acceder al mercado laboral.
3.2. Tipos de desempleo
- Desempleo cíclico: Es consecuencia de las fases de recesión de un ciclo económico.
- Desempleo estacional: Está relacionado con actividades que se concentran en épocas concretas del año, como el turismo o la agricultura.
- Desempleo estructural: Es el más preocupante. Persiste incluso en fases de crecimiento económico, ya que se debe a desajustes entre la cualificación de los trabajadores y las necesidades de las empresas.
- Desempleo friccional (o voluntario): Se origina cuando las personas dejan sus empleos voluntariamente para buscar otras oportunidades mejores o mientras se incorporan por primera vez al mercado laboral.
3.3. Medición del desempleo
En España, existen dos formas principales de medir el desempleo:
- La Encuesta de Población Activa (EPA): Realizada trimestralmente por el INE (Instituto Nacional de Estadística), es la estadística oficial y homologada a nivel europeo.
- El paro registrado: Son los datos mensuales recogidos por el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal), el antiguo INEM, que contabiliza a las personas inscritas como demandantes de empleo.
Clasificación de la población
- Población menor de 16 años: No están legalmente capacitados para trabajar.
- Población mayor de 16 años: Se divide en:
- Población activa: Personas que trabajan (población ocupada) o buscan activamente empleo (población desempleada).
- Población inactiva: Personas que, estando en edad de trabajar, no trabajan ni buscan empleo (estudiantes, jubilados, personas dedicadas al hogar, etc.).
3.4. Teorías sobre el desempleo
- Teoría clásica: Sostiene que el desempleo es voluntario y se debe a que los salarios son demasiado rígidos y altos, impidiendo que el mercado laboral se ajuste.
- Teoría keynesiana: Argumenta que el desempleo es involuntario y se produce por una insuficiencia de la demanda agregada en la economía.
- Teoría del desempleo estructural: Se centra en los desajustes entre la oferta y la demanda de trabajo por factores como la tecnología, la globalización o la falta de formación adecuada.
- Teorías del impacto tecnológico: Debaten si la tecnología es una causa neta de destrucción de empleo o si, por el contrario, crea más oportunidades de las que elimina.
3.5. Políticas de empleo
Son las medidas que adoptan los gobiernos para reducir el desempleo. Se pueden clasificar en:
Políticas para contraer la oferta de trabajo
Buscan reducir el número de personas que buscan empleo.
- Jubilaciones anticipadas.
- Prolongación de la edad de escolarización obligatoria.
- Reducción de la jornada laboral.
- Disminución de las horas extras y el pluriempleo.
- Fomento del trabajo a tiempo parcial.
Políticas para estimular la demanda de trabajo
Buscan aumentar el número de puestos de trabajo disponibles.
- Estimular la demanda de bienes y servicios mediante políticas fiscales o monetarias.
- Subvencionar la contratación de ciertos colectivos.
- Aprobar programas de creación de empleo público temporal.
- Estimular la creación y el desarrollo de las pymes.
Políticas de formación y colocación
Buscan mejorar el ajuste entre oferta y demanda.
- Mejorar los servicios públicos de búsqueda de empleo.
- Fomentar la movilidad geográfica de los trabajadores.
- Promover la cooperación entre sindicatos y empresarios.
- Ofrecer incentivos para reducir la discriminación de colectivos vulnerables (jóvenes, parados de larga duración, mayores de 45 años, personas con discapacidad, etc.).
Políticas centradas en el autoempleo
Fomentan la creación de empresas y el trabajo por cuenta propia, identificando nuevos «yacimientos de empleo» (actividades que cubren nuevas demandas sociales).
