Glosario de Conceptos Económicos y de Infraestructura
- AVE: comprende los servicios de larga y media distancia que transcurren por las líneas de alta velocidad (250 km/h) de nueva construcción y ancho internacional. La red de AVE es la más extensa de Europa.
- Comercio exterior: conjunto de operaciones comerciales y financieras de intercambio de bienes y servicios que realiza un país con otros y que comprende las exportaciones e importaciones.
- Comercio interior: operaciones comerciales y financieras que se realizan entre agentes económicos que están presentes en el mismo país y sujetos a la misma jurisdicción.
- Comercio mayorista: tipo de actividad comercial que engloba todas las operaciones de compra y venta de productos cuyo destinatario no es el consumidor final. Se realiza al por mayor (en grandes cantidades).
- Comercio minorista: al igual que el mayorista, es una actividad comercial, pero en este caso el destinatario es el consumidor final.
- Economía sumergida: conjunto de transacciones monetarias no declaradas de forma correspondiente a las autoridades fiscales o monetarias competentes (dinero negro). Incluye tanto las actividades formales como las informales.
- Estacionalidad turística: concentración de la demanda en un determinado periodo del año. Los principales factores que pueden provocarla son el clima y el medio natural, como por ejemplo en los destinos turísticos de “sol y playa”.
- Exportación: conjunto de bienes y servicios vendidos por un país en territorio extranjero para su utilización.
- Franquicia: tipo de contrato en el que una empresa (franquiciadora) cede a otra (franquiciada) el derecho a la comercialización de ciertos productos o servicios dentro de un ámbito geográfico determinado y bajo unas condiciones fijadas, a cambio de una compensación económica.
- Globalización: proceso creciente de interdependencia económica mundial provocada por las nuevas tecnologías de la información y la comunicación y la liberalización de los mercados internacionales, entre otros factores.
- I+D+i: tareas dedicadas a la generación de nuevo conocimiento científico (investigación) y su posterior aplicación al sector productivo (desarrollo). Más tarde se completa con la “i” de innovación, que es decisiva para impulsar la competitividad económica de las empresas y de los países.
- Importación: al igual que la exportación, se refiere al intercambio de bienes y servicios, pero en este caso son comprados en el extranjero para su uso en territorio nacional.
- Multinacional: empresa que posee o controla establecimientos de producción, distribución y venta en más de un país.
- PYMES: pequeñas y medianas empresas; en España constituyen la mayoría del tejido empresarial.
- PIB (Producto Interior Bruto): suma de todos los bienes y servicios producidos en un país durante un tiempo determinado, generalmente un año.
- Red de transporte: compuesta por infraestructuras o construcciones fijas por las que circulan los medios de transporte: carreteras, ferrocarriles, estaciones, aeropuertos, rutas marítimas, entre otros.
- Renta per cápita: indicador económico que mide la relación existente entre el nivel de renta de un país y su población. Se obtiene dividiendo el PIB entre el número de habitantes.
- Sector Terciario: sector que incluye las actividades económicas cuyo fin es la producción de servicios que satisfagan las necesidades de la población. No producen bienes materiales, sino que prestan servicios a la población, a las instituciones y a las empresas.
- Terciarización (Turismo): conjunto de actividades que realizan las personas durante sus viajes y estancias en lugares distintos al de su entorno habitual, por un periodo de tiempo inferior a un año y por motivos de ocio, trabajo u otros.
El Comercio y su Evolución en el Contexto Global
El comercio consiste en intercambiar mercancías y servicios por capitales o por otro bien o servicio de valor similar entre vendedores y compradores. Gracias a la globalización, los mercados se han liberalizado, lo que ha contribuido al aumento del comercio y de todos los sectores que intervienen en él. Además, ha incrementado la competencia entre empresas, lo que ha favorecido los procesos de deslocalización y externalización buscando reducir costes para poder llegar a más mercados; procesos que han derivado en el crecimiento de los servicios (marketing, transportes, logística, etc.).
Existen dos tipos principales: el comercio interior (intercambio de bienes y servicios por capital dentro de nuestras fronteras) y el comercio exterior.
Comercio Interior
El comercio interior supone el 14% del PIB y da trabajo al 18% de la población activa. Se divide en tres tipos: minorista, mayorista o una combinación de ambos. En estos casos, existe una red de intermediarios desde que se elabora el producto hasta que llega al consumidor final, lo que lo encarece. Por otro lado, la pandemia ha influido en un aumento del precio de los productos.
El crecimiento de las ciudades, la mejora de las comunicaciones y los transportes, los cambios en el mundo laboral (horarios de apertura y hábitos de consumo), el aumento del nivel adquisitivo de la población y las nuevas formas de pago (tarjetas, Bizum, etc.) han provocado un cambio en la demanda, pasando del dominio de las pequeñas empresas a una enorme variedad de formas comerciales.
Además, observamos un cambio en la oferta, debido principalmente a:
- Mejoras logísticas (autoservicio, menor mano de obra necesaria).
- Avances tecnológicos.
- Cambios en la publicidad y la mercadotecnia (que permite conocer las necesidades de los clientes y generar otras nuevas).
- La globalización, que ha favorecido el desarrollo de grandes empresas de distribución y el auge de las compras por internet.
Todo esto ha derivado en la caída de los pequeños negocios, que han sido sustituidos por grandes centros comerciales, hipermercados, grandes almacenes, el comercio electrónico (dominado por grandes corporaciones) y nuevas formas comerciales como las tiendas de segunda mano o los outlets.
Comercio Exterior
El comercio exterior ha crecido enormemente con la integración económica mundial. Hoy en día, con nuestra integración en la Unión Europea (UE), el comercio exterior aporta un 27% al PIB. Actualmente, solo dependemos de países de fuera de la Unión para la obtención de combustibles fósiles.
Para analizar este tipo de comercio se emplea la balanza de pagos, que se compone de:
- Balanza por cuenta corriente: incluye las balanzas de mercancías (déficit o superávit comercial), de servicios, de rentas y de transferencias corrientes (movimientos de dinero entre residentes de diferentes países).
- Balanza de capital: registra el dinero destinado al desarrollo de los países con proyectos de mejora.
- Balanza por cuenta financiera: registra la entrada de capital de otros países y las salidas al resto del mundo.
La balanza de pagos puede resultar en equilibrio, en déficit (más importaciones que exportaciones) o en superávit. Nuestra balanza de pagos es tradicionalmente deficitaria por causas como nuestra dependencia energética o el hecho de ser un país receptor de inversiones extranjeras.
