Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i)
1. Investigación
- Investigación básica: Consiste en trabajos experimentales o teóricos que se emprenden principalmente para obtener nuevos conocimientos acerca de los fenómenos y hechos observables, sin pensar en darles ninguna aplicación o utilización determinada. Es la búsqueda del saber por el saber, con independencia de su aplicabilidad o utilidad.
- Investigación aplicada: Consiste también en trabajos originales realizados para adquirir nuevos conocimientos; sin embargo, está dirigida fundamentalmente hacia un objetivo específico: determinar posibles usos prácticos de los hallazgos realizados por la investigación básica.
2. Desarrollo
- Desarrollo experimental: Consiste en trabajos sistemáticos que aprovechan los conocimientos existentes obtenidos de la investigación y/o la experiencia práctica, y está dirigido a la producción de nuevos productos; a la puesta en marcha de nuevos procesos, sistemas y servicios; o a la mejora sustancial de los ya existentes. Es la aplicación de las ideas generadas por la investigación a fines productivos.
3. Innovación
La innovación consiste en la introducción de un nuevo, o significativamente mejorado, producto (bien o servicio), de un proceso, de un nuevo método de comercialización o de un nuevo método organizativo, en las prácticas internas de la empresa, la organización del lugar de trabajo o las relaciones externas. Por tanto, para que haya innovación en el seno de una empresa, hace falta como mínimo que el producto, el proceso, el método de comercialización o el de organización sean nuevos o significativamente mejorados para la empresa y se hayan introducido en el mercado, pero no tienen por qué ser un éxito comercial.
4. Formas de Desarrollo de la Investigación y Tecnología
4.1. Desarrollo interno de la investigación
- La tecnología generada se suele ajustar mucho mejor a las características de la empresa.
- Será fuente de ventaja competitiva, ya que solo la conocerá la empresa.
- Como inconveniente, está su alto coste y la asunción del riesgo de fracaso de la I+D.
4.2. Adquisición en el mercado
- Tiene menores costes, aunque genera dependencia de la empresa vendedora.
- No da ventajas competitivas, ya que está al alcance de cualquiera.
La Función de Aprovisionamiento
La función de aprovisionamiento consiste en comprar los elementos necesarios para la actividad de la empresa y almacenarlos hasta el inicio del proceso de producción o de comercialización. Su objetivo fundamental es suministrar al área de producción los materiales necesarios (materias primas, envases, embalajes, etc.) para llevar a cabo la fabricación y al área de comercialización los productos objeto de venta por parte de la empresa.
Además, ha de organizar los diferentes inventarios que se generan en este proceso. Por tanto, la función de aprovisionamiento recoge tres aspectos fundamentales:
- Compras
- Almacenamiento
- Gestión de inventarios
Importancia según el Sector de Actividad
- En una empresa industrial: La empresa adquiere materias primas, las transforma y obtiene un producto final. Por tanto, hay dos momentos en los que tenemos existencias en el almacén: primero, cuando las materias primas permanecen en el almacén listas para empezar a producir; y segundo, cuando los productos han sido elaborados y permanecen en el almacén para ser vendidos.
- En una empresa comercial: Solo hay dos movimientos en el almacén, ya que entran productos terminados, que se llaman mercaderías (como el iPhone), y permanecen allí hasta que son vendidos.
Las Existencias o Inventarios
Las existencias o inventarios son los materiales que permanecen almacenados en la empresa para ser usados en la producción o vendidos.
Tipos de Existencias
- Materias primas: Son materiales que deben transformarse y forman parte de los productos fabricados por la empresa. Por ejemplo, la madera que se usa para fabricar muebles.
- Productos en curso: Son productos que todavía están en fase de elaboración y, por tanto, aún no pueden venderse. Por ejemplo, la mesa a la que todavía le queda la fase de pulido y pintura final.
- Productos terminados: Son productos que la empresa ha fabricado y ya están listos para la venta. En nuestro ejemplo, la mesa ya completamente terminada.
- Mercaderías: Son productos comprados por la empresa a los cuales la empresa no hace ninguna transformación, y están listos para que sean vendidos. Por ejemplo, una tienda de móviles que compra varios iPhone para luego venderlos sin hacer ningún tipo de cambio en ellos.
- Otros aprovisionamientos: Son otros materiales que no corresponden a las definiciones anteriores, como envases, embalajes, material de oficina. Por ejemplo, los frascos en los que vienen los perfumes son envases (no podemos usar el producto sin el envase); la caja de cartón donde viene el ordenador que compramos es embalaje (una vez que abrimos el producto, el embalaje se tira); y los folios, bolígrafos o la tinta de la impresora serían material de oficina.
Factores que Determinan la Productividad
La productividad empresarial está influenciada por diversos factores clave:
- Incremento en la inversión de bienes de capital: Si los trabajadores de una empresa cuentan con maquinaria o herramientas que les permiten desempeñar su trabajo con mayor rapidez o precisión, lo lógico es que se incremente la productividad de la misma.
- Mejora del capital humano: La educación, la formación profesional y la experiencia de los trabajadores son fundamentales para la mejora de la productividad de las empresas. La productividad tiene un gran impacto también en los salarios del trabajador: un incremento de la formación del personal de la empresa mejora considerablemente los resultados productivos de la misma.
- Calidad en la gestión de los recursos: Implica el proceso de selección de medios humanos y materiales, y continúa con actividades tales como la programación y control de la producción y los inventarios.
- Mejoras tecnológicas: Se logran a través de la introducción de nuevas formas de producción o mejoras de las existentes. Por ejemplo, la introducción de maquinaria en la agricultura (cosechadoras, tractores), o la implementación de sistemas como el Just in Time o el modelo ABC para la gestión de inventarios.
Valoración de Existencias
1. Valoración de las Entradas de Existencias
Las existencias almacenadas, como cualquier otro bien o activo de la empresa, tienen una valoración económica. La normativa contable (Plan General de Contabilidad) establece que las existencias se han de valorar por su:
- Precio de adquisición: Si los productos son comprados por la empresa a sus proveedores. Es el importe total de la compra, según la factura del proveedor y sin incluir el IVA deducible, más todos los gastos que haya generado la operación (transportes, seguros, envases, embalajes, etc.).
- Coste de producción: Si los productos los ha elaborado internamente la empresa. Es la suma del precio de adquisición de las materias primas y de los materiales consumidos en la fabricación, de los costes directos de la producción (mano de obra, energía, etc.) y de la parte proporcional de los costes indirectos (otros salarios, alquiler del local, etc.) imputables a la producción.
2. Valoración de las Salidas de Existencias
En las empresas entran en el almacén existencias de manera continua. El problema es que el precio de adquisición o el coste de producción varía con las diferentes entradas. Si tenemos existencias que tienen diferentes costes, a la empresa se le plantea la duda, cuando las vende, sobre qué coste tuvo realmente la existencia. Para ello, tenemos dos métodos de valoración de la salida de las existencias:
- El método del Precio Medio Ponderado (PMP): La valoración del conjunto de existencias que tiene la empresa en el almacén se realiza de acuerdo con el valor medio de los precios de adquisición o de los costes de producción de los distintos lotes, ponderados por las cantidades adquiridas o consumidas.
- El método FIFO (First In, First Out): Con este criterio, las entradas y las existencias se valoran a su precio de adquisición o coste de producción, de acuerdo con el orden cronológico de entrada en el almacén. Sin embargo, las salidas de existencias se valoran a los precios o costes de las primeras existencias que entraron. De esta forma, las existencias que quedan después de una venta o salida son valoradas a precios o costes más recientes.
El Coste de los Inventarios
La gestión de inventarios implica considerar diversos tipos de costes:
- Coste de adquisición, reposición o renovación: Es el coste de comprar las existencias, es decir, el precio por el que compramos la materia prima o las mercaderías.
- Coste de pedido: Es el coste de realizar un pedido, ya que cada vez que solicitamos que nos manden existencias tendremos unos costes administrativos. Necesitamos trabajadores que comprueben las existencias que tenemos y las que necesitamos, y que luego llamen a los proveedores.
- Coste de almacenamiento, posesión o mantenimiento: Tener existencias en el almacén también tiene un coste. Las existencias ocupan un lugar en la empresa por el que pagamos un alquiler y que podríamos usar para otra cosa. Además, un mayor almacén también nos lleva a un mayor gasto de personal que se encargue de estas existencias. Las existencias también se pueden deteriorar con el paso del tiempo.
- Coste de ruptura de los stocks: Las empresas industriales necesitan materias primas en el almacén para poder llevar a cabo su producción y productos terminados para poder vender a sus clientes. Las empresas comerciales necesitarán mercaderías. Quedarse sin existencias puede suponer un alto coste para la empresa. Si nos quedamos sin materias primas, no podremos seguir produciendo. Si faltan productos terminados o mercaderías, entonces no podremos vender a los clientes.
De esta manera, vemos que no es fácil para la empresa estimar cuántas existencias o inventarios mantener en el almacén:
- Un nivel elevado de existencias tiene grandes costes de almacenamiento, pero disminuye los costes de pedido (hacemos pocos pedidos de muchas existencias) y permite conseguir descuentos por volúmenes de compra y disminuye los riesgos de ruptura de stocks.
- Un bajo nivel de existencias abarata los costes de almacenamiento, pero aumenta los costes de pedido (hacemos muchos pedidos de pocas existencias) y hay riesgo de ruptura de stocks, además de no poder aprovecharse de descuentos por volumen de compra.